En lo personal yo no soy tan fan del aroma a vainilla, porque usualmente los productos terminan teniendo el olor más dulce y empalagoso que me hace sentir que estoy rodeada de dulces y la verdad, guácala. Pero me encantó como la nota de vainilla en Halloween Fever es discreta y no me atonta cuando lo uso y combina a la perfección con uno de mis aromas favoritos: el jazmín. Después de un rato sobre mi piel el aroma se queda ahí sin gritar "¡hey! ¡ésta niña trae perfume!" y no siento que camine y deje una estela olorosa detrás de mí como pasa con algunos más fuertes (por eso no uso perfumes Chanel, siento que todo el mundo se da cuenta que los traigo puestos).
En resumen es muy citadino, femenino, dulce y fiestero; así que cuando lo vean en las tiendas chéquenlo y me cuentan qué les pareció.
El jueves pasado fue la fiesta de lanzamiento en la colonia Roma, con un gran ambiente, buena música, tragos coquetos y sobre todo varios amigos que hacen que me la pase bien siempre. Ya saben ustedes que mis fotos son pésimas, pero como quiera les comparto las pocas que tomé.
Dense una vuelta por la página de Halloween Fever y el blog.